GUÍA ISLANDIA
Llegamos al Aeropuerto de Keflavik (KEF) y teniamos alquilado una furgoneta. Íbamos con tiendas de campaña e hicimos casi todos los días acampada libre, excepto en Reykajavik y en Dalvik, que nos quedamos en el camping.
El primer día hicimos del tirón un Keflavik – Akureyri siguiendo la Ring Road. De alli fuimos al Lago Mytvatn y a varias zonas de gran actividad volcanica (Krafla, por ejemplo), también visitamos las cataratas de Godafoss ( las cataratas de los dioses). Tras eso nos volvimos hacia Akureyri y de alli, en el mismo fiordo hasta Dalvik, donde cogeriamos un ferry, que tras 4-5 horas de trayecto nos dejo en Grímsey. Grímsey es una pequeña isla cuyo mayor atractivo es que la cruza el Circulo Polar Ártico, hay un pequeño pueblo, donde deben vivir aproximadamente 100 personas, y tiene gran cantidad de acantilados con una gran variedad de aves marinas, es un gran sitio para poder ver Frailecillos. A la vuelta, cerca de Dalvik, también visitamos Olafjordur y Siglufjordur.
Dejamos esa zona y nos dirijimos hacia la zona de los Westfjords donde visitamos su capital (Isafjordur). En esta zona invertimos unos 3 días, y la mayoría de ellos fueron admirando el espectacular paisaje de esa zona (personalmente fue la zona que más me gustó). Las carreteras por aquí empeoran bastante, pero nosotros pudimos recorrerla con una furgoneta.
Abandonamos la zona de fiordos para bajar a la Peninsula de Snaefellsness.
Esta peninsula da nombre al famoso volcan Snaefells, por donde Julio Verne en su novela “Viaje al Centro de la Tierra”, entra para llegar al interior del planeta. El volcán está en el extremo Oeste, coronado por un glaciar y rodeado de algunas playas desiertas que quitan el sentido. También visitamos algunos pueblos como Olafsvik o Stikkisholmur.
Después de visitar esta península seguimos nuestra ruta hacia el sur, nos saltamos Reykajavik para los últimos días, y fuimos a dos de los grandes atractivos turísticos de Islandia: Gulfoss, una inmensa cascada, y la zona de Geysir, donde se encuentra el Geyser que da nombre a este fenómeno en el resto del mundo. Esta es quizás la zona más turística y además, ambas “atracciones” se encuentran muy cerca la una de la otra.
Despues seguimos en nuestra ruta hacia la costa Sur, en dirección al Vatnajokull.
Destacaría el pueblo de Vik, es la población mas al sur de Islandia, con una preciosa playa de arena negra y unas rocas que salen del mar a modo de barrera (según nos explicaron, era una barrera construida por Trolls para impedir la entrada a los humanos.
Puede parecer una chorrada, pero este tipo de historias abundan mucho en Islandia, y tras 15 días de recorrido llegas a creer en la existencia de algunos de esos seres de los que hablan los islandeses y sus Sagas).
A muchos kilometros del gran glaciar ya se podia ver sus majestuosas cumbres, y una vez que llegas a un extremo, pasas varias horas viendo como grandes lenguas de hielo bajan hasta el nivel del mar. Este espectaculo llega a su apageo cuando te encuentra en el Jokullsarlon.
El Jokullsarlon es un lago pegado al mar donde rompe el gran Vatnajokull una de sus lenguas de hielo dejando grandes icebergs, y donde con suerte se pueden ver grandes paredes de hielo resquebrajandose hasta caer al agua... un espectaculo. El Vatnajokull es inabarcable, tiene una extensión de unos 8.600 kilómetro cuadrados y llega a superar el kilometro de espesor en algunos tramos.
Depues de esto nos volvimos a Reykjavik y estuvimos 4 días ( con 2 días es más que suficiente) disfrutando de sus noches, sus gentes y sus maravillosas piscinas de aguas calientes.
Resumiendo bastante, este fue nuestro viaje, realmente inolvidable y lleno de pequeños trekkings y excursiones en las distintas zonas que visitamos; muchas cascadas, playas, fiordos, glaciares y volcanes que nos íbamos encontrando a medida que recorríamos la isla. Esto no lo he explicado por no extenderme demasiado, pero si alguien estuviera interesado ya sabe donde encontrarme y estaré encantado de ayudarle.
Fuente: www.viajerosolidario.com
